Alternativas para la lactancia nocturna


Frecuentemente la lactancia nocturna es característica en los bebés de alta demanda. Es como si fueran a su restaurante favorito. El ambiente es apacible, el servicio es familiar, la cocina estupenda y ellos aman a la dirección. ¿Quién puede reprocharles que sean gourmets durante toda la noche?
Intente estas sugerencias para tratar con la lactancia nocturna siempre que su bebé tenga más de 12 meses y tome otros alimentos además de leche materna:

1. ¿Cuál es el problema? ¿Cuánto de “problema” tiene el frecuente amamantamiento nocturno?. Esta etapa de lactancia nocturna intensa pasará. Ambos, tú y tu bebé, algún día dormiréis durante toda la noche. Aunque, si estás privada de sueño hasta el grado de funcionar mal al día siguiente, tu día a día se resentirá y el resto de tus relaciones familiares se deteriorarán. Puede que necesites hacer algunos cambios en tu esquema de amamantamiento nocturno.
Un principio de crianza que nosotros aprendimos con muchos niños hace tiempo es:

SI TE RESIENTES, ¡HAZ UN CAMBIO!

Incluso si tú no puedes conseguir que tu
bebe duerma toda la noche de un tirón, puedes ayudarle a reducir el las tomas nocturnas, haciendo la situación más tolerable para ti. He aquí como:

1. Haz mamar mucho a tu bebé durante el día. (+ 1 mes)
A los niños pequeños les encanta mamar, aunque a menudo durante el día están tan ocupados que ellos olvidan hacerlo, o mamá está tan ocupada que ella también lo olvida. Pero durante la noche, vosotros estáis tan sólo a unos pocos centímetros de distancia y el niño quiere recuperar el tiempo perdido. (Esta escena es común cuando una madre que amamanta regresa a casa después del trabajo). Encontrando más tiempo para amamantar durante el día el pecho será menos atractivo durante la noche.

2. Incrementa el contacto durante el día. (+ 1 mes)
Lleva a tu bebé en una bandolera y dale a tu bebé más contacto durante el día. Es fácil cuando los bebés crecen bastante y disminuye la cantidad de tiempo que necesitan estar en contacto. El amamantamiento durante toda la noche puede a veces ser una señal del bebé a su madre, recordándole que no tenga tanta prisa en que se independice. En un desarrollo sano de la independencia, el niño va y viene, se aleja y se aferra, paso a paso hasta que está más tiempo alejándose que volviendo. Muchas madres notan que sus bebés y niños pequeños muestran un aumento de la necesidad de mamar y de ser cogidos antes de emprender un nuevo estado de desarrollo como puede ser gatear o caminar.

3. Despierta al bebé para una toma completa justo antes de irte a la cama. (+ 12 meses)

A menos que quieras irte a dormir para levantarte tan sólo 1 ó 2 horas después, amamántale justo antes de irte a dormir. De este modo, tu sueño se verá interrumpido una vez menos, y tú (posiblemente) podrás dormir de seguido un buen rato.

4. Aplica el “plan padre”. (+18 meses)

Trata de hacer que se duerma en una bandolera o portabebés. Después de haberlo alimentado, pero antes de que esté dormido, paséalo en la bandolera por casa o alrededor del edificio. Cuando esté profundamente dormido, es fácil dejarlo en tu cama, sacarlo de la mochila y que lo coja papá. Este es un buen modo para que papá tenga parte en la rutina de irse a la cama. Eventualmente, tu bebé asociará los brazos de papá con caer dormido, y él de buena gana aceptará el acomodo de papá en medio de la noche como una alternativa al amamantamiento. Otras formas fáciles de hacer que tu bebé se duerma sin amamantarle incluyen frotar o tamborilear su espalda, cantarle y mecerle, e incluso bailar en la oscuridad algunas melodías que le gusten y/o canturrear nanas.

5. No dejes el pecho tan disponible. (+ 12 meses)

Una vez que tu bebé haya sido alimentado para dormir, usa tu dedo para separarle del pecho. Cúbrete y duerme tapada. Un bebé que no puede encontrar el pezón rápidamente, puede caer dormido de nuevo. Si tú puedes permanecer alejada lo suficiente para evitar que coja el pecho, no lo podrá coger de nuevo tan pronto.

6. Simplemente dí “no”. (+ 14 meses)

Con nuestro hijo Matthew, el segundo, Martha estaba desesperada por dormir. Yo podía oír un diálogo como: “No… No… No… Ahora no. Por la mañana. Mamá duerme. Tú duermes también”. Una voz firme pero calmada, apacible, casi siempre lo conseguía. Tú puedes aprender a permanecer tranquila en esta situación cuando sabes que no estás dañando tu protectora forma de crianza.

7. «Los dibus se van a la cama». (+18 meses)
Alrededor de los 18 meses, tu bebé ya tiene la capacidad de entender frases sencillas. Enseña a tu bebé a no esperar ser amamantado cuando se despierte, diciendo algo como “Cuando el Sr. Sol se levante, puedes mamar de nuevo”.

Cuando le ayudes a irse a dormir, (o en el primer o segundo despertar) las última cosa que debería oír es “Mamá se va a la cama, papá se va a la cama, los dibus se van a la cama, los bebés se van a la cama” (o en lugar de «dibus», su peluche favorito). Cuando se despierte durante la noche, lo primero que tiene que oír es un amable recordatorio: “los dibus se van a la cama, los bebés se van a la cama también”. Esta técnica requiere una o dos semanas de repetición. Pronto captará el mensaje de que el día es para alimentarse y la noche para dormir. Si los “dibus “permanecen dormidos, los bebés también (o al menos acostados).

8. Ofrece una alternativa. (+ 18 meses)

Los bebés de alta demanda  no aceptan sustitutos rápidamente. Pero hay que intentarlo. Recuerde, amamantar no siempre significa alimentar. Honra a tu marido con su cuota de “participación
nocturna”. Esto le dará a papá la oportunidad de desarrollar creativas herramientas nocturnas parentales y al niño la ocasión de ampliar su aceptación de cuidadores nocturnos.
Martha dice: “Una de las maneras que nosotros tuvimos de sobrevivir con niños pequeños que quieren amamantar frecuentemente durante la noche fue que yo estuviese temporalmente indisponible durante las “llamadas nocturnas”.
Bill podía llevar a Stephen en una bandolera, hasta que él se acostumbró a la manera de hacerle dormir de Bill. Cuando él se despertaba, Bill de nuevo le confortaba en su necesidad balanceándole y sosteniéndole en una posición acurrucada, usando una cálida envoltura y cantándole una nana. Los bebés pueden inicialmente protestar cuando va su padre en lugar de su madre, pero recuerda, llorar y agitarse en los brazos de un padre amoroso no es lo mismo que llorar “a gritos” solo en su cuna. Papá, ten en cuenta que has de permanecer calmado y paciente ante el reto que supone este proceso nocturno. Tú les debes a ambos, madre y bebé, no ponerte nervioso o enfadado cuando tu bebé se resista al acomodo que tú le ofreces.
Intenta que este destete-con-padre empiece un fin de semana o en otro momento en que papá pueda conseguir 2 ó 3 noches después de las cuales no tenga que trabajar al día siguiente. Tú probablemente tengas que venderle la idea de esta técnica, aunque nosotros la hemos probado personalmente y funciona.
Asegúrate de usar estas tácticas de destete nocturno sólo cuando tu bebé sea suficientemente mayor y tu instinto te diga que tu bebé mama durante la noche por hábito y no por necesidad.

9. Aumenta la distancia entre ambos al dormir. (+ 12 meses)
Si las sugerencias de más arriba no seducen a tu persistente lactante a disminuir sus demandas, aunque tú aún sientas que debes alentarle a hacerlo, intenta otro plan de sueño. Intenta ponerle en una cama “sidecar” (adosada a la tuya), en un colchón o futón a los pies de tu cama o incluso a dormir en otra habitación con un hermano. Papá o mamá pueden acostarse junto al bebé para confortarle si él se despierta. Mamá puede incluso amamantarle si es necesario y entonces volver a hurtadillas a su cama. Si parece continuar cerca le alienta a continuar despierto.

10. Duerma en otra habitación.(+ 12 meses)

Si tu bebé persiste en esperar ser amamantado toda la noche, reubica al “comensal nocturno de mamá” en otra habitación y deja al bebé dormir cerca de papá durante unas noches. El debería despertarse menos a menudo cuando el pecho no está tan disponible y cuando se despierte, tendrá que aprender a aceptar el acomodo de papá.

11. Permita la bebé ser el barómetro.
Cuando intente cualquier técnica de cambio de comportamiento en un niño, no persista con un mal experimento. Use el comportamiento diurno del niño como un barómetro del tiempo para ver si su cambio en el estilo de crianza nocturna está funcionando. Si después de varias noches de trabajar en el destete nocturno su bebé es el mismo de siempre durante el día, persista con su cambio gradual. Si, sin embargo, su bebé se torna más aferrado, quejoso o distante, tómelo como una pista de que debe ir más despacio en su velocidad de destete nocturno.
Los bebés se destetan y un algún día ellos dormirán a lo largo de toda la noche. Este estado de alta demanda de atención parental nocturna pasará. El tiempo en sus brazos, en su pecho y en su cama es relativamente corto durante la vida de un bebé, mientras que el recuerdo de el amor y la disponibilidad permanecerá para siempre.

Texto del Dr. William Sears. web: http://www.askdrsears.com/
Traducción de Selenita.


 

Envía tu pregunta

 


¿Te ha ayudado? Compártelo: