- Lun, 17 Jul 2023, 19:41
#436277
Hola Katty! Cómo estás? Mi nombre es Belén y hoy te estaré respondiendo como alumna en prácticas de la formación de sueño infantil de CESI. Soy mamá, puericultora, instructora BabySpa®, doula y alquimista placentaria.
Te leo y me acuerdo de ese primer tiempo cuando nació mi segundo hijo dónde me sentía igual que vos ahora, con la necesidad de atender a los dos por igual pero avocada mucho más al bebé. Sentía que dejaba a la más grande de lado y eso me daba mucha culpa. Entender las necesidades básicas de los recién nacidos, saber qué esperar me ayudó a poder sobrellevar mejor ese tiempo. Solemos escuchar que si les damos el pecho para dormir o si los tenemos todo el tiempo a upa los malcriamos… Son estos comentarios y creencias culturales que arrastramos a través de los años lo que generan expectativas y deseos que distan mucho de lo que nuestro bebé necesita y que lo único que ocasionan es frustración y culpa en nosotras.
¿Sabías que somos los mamíferos que más inmaduros nacemos? Al nacer dependemos pura y exclusivamente de nuestra mamá para poder sobrevivir y para poder seguir desarrollándonos. ¿Escuchaste hablar alguna vez de exterogestación? Se le llama así al período posterior al nacimiento (hay quienes dicen 3 meses, otros 6 y otros 9) en dónde sería ideal poder replicarle al bebé lo que el bebé tenía dentro del útero. Cuando estaba en tu panza, su casita, tenía contacto, alimento y amor permanente, tenía todas sus necesidades cubiertas. Nada le hacía falta. Por lo que es normal, aunque eso no quita que sea agotador, que tu bebé te demande como lo está haciendo.
¿Sabes otra cosa? Es natural que tu bebé necesite y quiera tu pecho para dormirse, dárselo no quiere decir que estás haciendo las cosas mal. La succión los calma y los ayuda a dormirse sumado a algunos componentes que tiene la leche materna que son inductores del sueño. A través de la leche también vas a ayudarlo a que poco a poco vaya incorporando el ritmo circadiano (que entienda que hay un día y una noche) por medio de la hormona melatonina que está presente en ella.
Los bebés no piden nada que no necesiten, su llanto no es para manipularnos, no es porque nos tomaron el tiempo, es su forma de hacernos saber que algo le incomoda, que algo le hace falta.
Te juro que te entiendo lo agobiante que resulta por momentos la demanda porque como bien decís tenes otro hijo y también la necesidad y el deseo de hacer otras cosas pero creeme que lo que tu bebé te pide no es ni más ni menos lo que necesita. Sentirte cerca le da la seguridad de que está a salvo, de que su cuidador (en este caso, vos, su mamá) está ahí sosteniéndolo y cuidándolo.
En relación a esta necesidad de contacto, te puede ser útil durante el día portearlo, esto es, usar un fular. El fular permite llevar a tu bebé colgado en tu pecho y él se sentirá como cuando estaba en tu panza. Te permitirá tener las dos manos libres para poder hacer otras cosas, dentro de ellas poder dedicarle tiempo a tu hijo más grande, mientras tu bebé duerme. También podrías amamantarlo ahí si se despertara, lo que podría facilitarte un poco más las cosas y traerte más tranquilidad.
También estaría bueno si en algún momento del día podes pasar un ratito de exclusividad con tu hijo más grande, les va a hacer bien a todos también. En ese momento tu bebé podría quedarse con tu esposo, quien podría portearlo también para que se sienta seguro y contenido en la ausencia de mamá.
Sería bueno también, en la medida de tus posibilidades, que cuentes con personas que puedan ayudarte para poder sobrellevar mejor estos días, lo que escuchamos hablar como red de sostén o tribu. Personas que puedan darte una mano para alivianar la carga sea poniendo el lavarropas, sacando la ropa del tender, haciendo las compras, preparando la comida, jugando con tu hijo más grande, o simplemente haciéndote compañía mientras maternas.
Si sentís las ganas, puede ayudarte también encontrar algún momento en el día para hacer algo por vos que te permita oxigenarte, despejarte y recargar energías. No te obligues a hacerlo si no lo sentís porque sino te hará sentir culpable pero creeme que es también una buena herramienta para transitar este camino de la maternidad. Cuidarnos y mimarnos a nosotras, hace que podamos hacerlo con quienes más amamos.
En relación a los horarios te animo a que intentes crear rutinas que ayuden a tu bebé a poder dormirse sin tener en cuenta tanto horarios fijos. ¿Vos te dormís siempre a la misma hora? ¿Dormís la misma cantidad de horas? Seguramente tu respuesta sea no y está bien que así sea! Somo seres humanos, no robots y aunque muchas veces nos quieran hacer creer que ellos lo son, no lo son entonces querer establecer horarios fijos sólo nos trae frustración e incomodidad.
María Montessorri decía que lo mejor que podemos hacer es seguir al niño. Te propongo que puedas hacer esto, salir de los manuales e indicaciones surrealistas para conectarte con lo que tu bebé necesita. Está bueno que vaya incorporando de a poco que existe un día y una noche. Sus siestas de día sería bueno que pueda hacerlas con la luz natural y los sonidos ambiente que haya y que su sueño nocturno esté acompañado de todo lo que la noche nos trae: el silencio (a veces esto no resulta y duermen mejor escuchando sonidos como los de nuestro corazón que escuchaban cuando estaban en nuestra panza), la oscuridad y la repetición de las mismas actividades todos los días (en la medida de lo posible, como pueden ser un masaje, el baño, luz tenue y música suave, darle el pecho) para que lo ayuden a relajarse y asociar ese momento con el descanso.
Las siestas durante el día son necesarias para un buen descanso a la noche. Estas siestas pueden durar entre 15 minutos o 4 horas por lo que es normal esto que te pasa de no saber cuánto va a dormir. Por su edad debiera estar haciendo entre 6 a 8 siestas durante el día, claro está que este parámetro es aproximado porque dependerá de lo que tu bebé necesite. Puede ayudarlos un montón que puedas estar más atenta a identificar sus señales de sueño, son esas señales que te muestran que está cansado para que puedas adelantarte a ellas y llevarlo a dormir. Te podría ser útil anotar durante una semana cómo son sus días para después poder analizar esas anotaciones e identificar cuales son los momentos en los que duerme para poder adelantarte y crearle el ambiente favorable para el descanso sin necesidad de que sea una lucha o padecimiento el momento de dormir para ninguno de los dos.
Muchos dicen que no hay que ayudarlo, que el bebé se tiene que dormir solo como lo hacía en la panza… Quienes dicen esto se olvidan de que no estaba solo, estaba contenido y acompañado por vos. Que le des el pecho, que lo agarres a upa y acunes no está mal! Afuera necesita lo mismo que tenía adentro y adentro vos lo acunabas y contenías.
Lo estás haciendo bien, no te castigues ni culpes, estas dando lo mejor que podes y creeme que sos la mejor mamá para ellos.
Quizás muchas de las cosas que te he mencionado ya las has probado, de no ser así espero que te sirvan
Aquí estoy para acompañarte en lo que necesites.
Cariños!
Belén
Fuentes:
Berrozpe, M. (2023). Módulo XIII-(1) el ABC del descanso. En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).
Berrozpe, M. (2023). Módulo XIII-(2) el sueño de 0 a 3 meses. En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).
Berrozpe, M. (2023). Protocolo de intervención CESI®- DORMIR SIN LLORAR® de 0 a 3 meses. En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).
Belu Ossuna
@beluossuna.maternidad
Alumna en prácticas CESI