Ideas, trucos y experiencias para bebés de casi un año.

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por Carmen89
#436570 Hola grupo,

Os escribo porque estoy desesperada. Tengo un bebé de 11 meses el cual estamos haciendo un plan de sueño. Tengo muchas dudas con respecto al mismo, ya que mi hija se tira 2 horas berracando en llanto, no llorar normal, un llanto desconsolado. Mi asesora me dice que la calmé de menos a más pero siempre dentro de la cuna, ya que al tomarla para calmarla, al volverla a poner en la cuna, sus rabietas y llantos son el doble. Pues bien, mi hija no se calma de ninguna manera dentro de la cuna, por lo que se puede tirar llorando 2horas sin parar y finalmente se duerme del propio cansancio. Cuando tiene sus despertares nocturnos le pasa exactamente igual, y estas rabietas, 2horas aguantando verla sufrir… me genera la duda de si este método es bueno.
Yo (su madre) no consigo dormirla si no es en brazos. He avanzado en cuanto a que antes dormía en el pecho, pero mi asesora dice que estoy cambiando la muletilla teta por brazos y finalmente es lo mismo.
Estoy desesperada, angustiada y psicológicamente cansada y quemada. A ver si me pudieseis ayudar.
Mil gracias ♥️
por MonicaUG
#436589 Hola, mucho gusto, soy Mónica Ulloa, y te respondo como alumna en prácticas de la formación de sueño de CESI. Además de esto soy educadora y especialista en atención temprana de la primera infancia. Voy a intentar ayudarte.

Lamento mucho que veas a tu hija intranquila y que te sientas tan cansada y desesperada. Por supuesto que a cualquier madre le partiría el corazón ver a su hija llorar sin parar, y no tiene por qué ser así. La visión de este foro, como lo puedes ver en el nombre, y en la formación que llevamos todas las que estudiamos aquí, es alcanzar el dormir sin llorar. No es necesario dejar llorar a los niños para alcanzar que descansen bien. Podemos acudir a muchas otras estrategias para ir regulando su sueño, de manera realmente respetuosa y amorosa, siguiendo tus instintos maternales de protección.

Te comento que a los 11 meses, aunque ya los bebés han ido adquiriendo las fases de sueño que tenemos los adultos, pueden aparecer problemas de sueño relacionados con la conocida “angustia por separación”. Debido a esto, los niños buscan, inclusive más que antes, estar cerca de su figura de apego, que en este caso eres tú. Ella lo que espera de ti es tu atención, tu contacto visual y físico, por lo que es completamente normal que quiera estar siempre cerca tuyo y en tus brazos, y por eso busca y necesita tu cercanía también para dormir. Por esta razón posiblemente llora tanto por las noches al ponerla en su cuna, ya que lo que desea es saber que estás a su lado. No hay nada de malo en esto.
No hay nada de malo tampoco en que el pecho o los brazos sirvan para dormir a tu bebé. Darle teta siempre le ayudará a dormir más tranquila, y tus brazos son su lugar seguro. Estas son asociaciones que con la edad se pueden ir dejando poco a poco si tú quieres hacerlo, pero si no quieres hacerlo o no tienes problema, no es necesario. Al contrario, si te sientes muy cansada y tu hija se duerme rápidamente con la teta o en tus brazos, no es necesario que ambas sufran y sacrifiquen el sueño.

Ahora, ¿qué podría hacerse para mejorar el sueño de tu hija y que todos descansen mejor?

Por un lado, ¿han considerado el colecho, o al menos una cuna colecho? tomando en cuenta que al parecer lo que tu hija pide es cercanía. Así ella dormirá más tranquila en contacto, lo que podría disminuir los despertares (te adjunto en imagen reglas para el colecho seguro). Además, cuando se despierte, como te mencionaba más arriba, no hay problema si quieres dormirla con teta o en brazos, pero también puedes probar otras estrategias, nunca dejándola llorar, y siempre con contacto, como acariciarla o darle palmaditas en el pecho, arrullándola con el sonido de “shhhh”. Es bueno que te apoyes en el papá de la niña para que él se encargue de algunos de los despertares y también del proceso de dormirla.

Por otro lado, tu hija está en la etapa de salida de nuevos dientes, lo cual puede generar molestia y afectar el sueño. Si ves que babea mucho, está irritable y muerde todo lo que se encuentra, estas podrían ser señales. Lo que puedes hacer para ayudarla es: Darle masajes con los dedos limpios en las encías, ofrecer mordedores fríos, frutas y líquidos fríos, pues en general todo lo que sea frío les ayuda.

Las rutinas son sumamente útiles también. Si aún no tienen una, podrían empezar con actividades sencillas antes de dormir, como la teta, una canción de cuna o un cuento corto, un masaje, y a dormir. Eso le ayudará a siempre anticipar el momento de dormir y a llegar a él más relajada. La última acción que realices antes de dormir a tu niña, podría condicionar que esa sea la forma en que necesite volver a dormirse en los despertares. Por esto, en la rutina, puedes intentar acostarla antes de que se quede completamente dormida en tus brazos, y estando allí, darle unas palmaditas o cantarle. Este es un cambio que se debe de dar gradualmente y con mucha paciencia, ya que si se inquieta mucho luego de un par de intentos, debes de detenerte y volver a intentarlo al siguiente día. Es importante que el papá vaya participando también de esta rutina.

Intenta aplicar estas recomendaciones por unas semanas, pues hay que tener paciencia y constancia, y veamos si se observa una mejora. Espero que toda la familia se sienta más tranquila y puedan ver mejorado el sueño de bebé y el de ustedes.

Fuentes:
López, R (2023). Módulo: XIII El sueño de 8 a 12 meses. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del Sueño Infantil (CESI).


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por Karina SZ
#436591 Hola Carmen! :)
Soy Karina Schang de Lima, Perú; alumna en prácticas de la formación de sueño de CESI. También soy psicóloga y asesora de crianza respetuosa certificada en Disciplina Positiva para la familia y primera infancia. Soy mamá de un niño de 6 años.

Primero que todo entiendo la preocupación que sientes, nos queda claro como madres que si nuestro hijo llora es porque algo lo está incomodando y queremos hacer de todo para poder ayudarlo y darle calma. Te aplaudo también por darte este espacio y animarte a escribir la situación que estas viviendo. Voy a intentar ayudarte en tu consulta y tal vez también podamos ayudar a otras mamás que se encuentren en una situación parecida a la tuya.

En la etapa en la se encuentra Paula, que son los casi los 12 meses, podemos esperar muchos cambios importantes e hitos del desarrollo, como por ejemplo que los bebes muestran mayores destrezas a nivel motriz (gateo, dar los primeros pasos con ayuda), mayores recursos de lenguaje y atención, la salida de los dientes; asimismo la necesidad de explorar el entorno y también darse cuenta que tu bebe y tu son seres independientes y por ende cuando no te ve, se angustia mucho y llora.
Este último punto se llama “angustia de separación” y suele presentarse desde los 8 meses y puede aparecer nuevamente a las 12, 18 meses e inclusive hasta los 2 años. Esta situación es normal en los bebes y suele presentarse cuando sienten que su figura de apego (mamà) no está cerca de su campo de visión, cuando no quieren estar cerca a otras personas, las noches se vuelven muy difíciles con diversos despertarse y muestran resistencia a la hora de dormir.

En tu mensaje nos mencionas que lo que más te preocupa es que tu bebe no llore para dormir y que cuentas con una asesoría en sueño. En el registro de tus datos veo que Paula tiene de 4 a 5 despertarse en la noche y que demora en conciliar el sueño y mencionas que las rutinas que tienen son caóticas, entiendo que por los llantos ya que si veo que tienen horarios establecidos y eso de mucha ayuda! Vamos bien!

Cuéntame por favor un poco más sobre tus rutinas como mamà, ¿tù pasas la mayor cantidad de tiempo con tu bebe o sales a trabajar? ¿Quién te apoya en casa? ¿Han habido cambios en la dinámica familiar en las últimas semanas?

Mencionas también que una asesora de sueño los está apoyando. Sobre este punto siempre es importante hacer caso al “instinto de mamà”; es decir, si tu sientes que algo no va bien y ves a tu bebe sufrir, nos toca actuar y estar cerca.

Recuerda que tu pequeña Paula aun es bebe y en esta etapa sigue siendo lo más importante para ella, tu cercanía de mamá durante el día y al dormir, las muestras de afecto, los abrazos y la consistencia en las rutinas. Todo esto le dará mayor seguridad y confianza para explorar su ambiente. Para que un niño sea independiente, primero debe ser dependiente; es decir, debe aprender primero lo que es la confianza y seguridad a través tuyo para luego explorar y aceptar “el mundo”. Los brazos de mamá y papà nunca serán una muletilla ni traba, por el contrario, son necesarios y representan protección y calma. Tu bebe desde que estaba en tu barriga ha sentido el balanceo, tu voz, el contacto.

En este momento lo que debemos cuidar es la calidad del sueño de tu pequeña y por ende el tuyo, y aquí es clave priorizar en lo que te funciona a ti, que es mecerla en tus brazos hasta que se duerma, darle tu cariño, hablarle y decirle que todo va estar bien porque tú estas ahí con ella. Y si tu bebe llora cuando esta en la cuna, es porque solo quiere estar contigo y encontrar la calma, y tu sabes cómo lograr esto :)
Si es una opción para ti, podrían intentar lo que se llama un “colecho reactivo”, que es empezar a dormir a Paula en tu cama, cuidando siempre las medidas de seguridad. Al inicio igual tendrá algunos despertares porque notarà un cambio, pero luego al sentirte cerca, tu respiración y sobre todo tu presencia, le dará calma; sumado a eso la lactancia hará su trabajo y ayudará a que ambas se relajen. Cuando ponemos al bebe en su cuna, llora y se despierta es como si la "cuna tuviera pinchos", pero en realidad es que nuestros bebes se dan cuenta que no están cerca a nosotros y reclaman nuestros brazos.
Durante el día te sugiero cuidar sus rutinas y anticiparlas, unos 15 minutos antes de los momentos de siesta, verbalizar el estado y decirle “Paula veo que ya estas con sueño, mamá está contigo y te va acompañar a descansar”, túmbate con ella en tu cama, dale la teta y ayúdala a tener un descanso, ya que durante las noches la situación se torna difícil, “hazle creer” que tú también vas a dormir. Y si es necesario y tu cuerpo lo necesita también (por las noches difíciles), puedes aprovechar en tomar un descanso con ella.
En los momentos del día que Paula este despierta puedes empezar a hacer juegos como el “cu cu” o el “donde estàs”; en los cuales él bebe va a ver que es desaparecer y aparecer de forma divertida y poco a poco empezamos a trabajar en esa angustia que siente.
Si empezamos a ayudarla a tener siestas reparadoras y sobre todo sin llantos, el trabajo para la noche puede mejorar. La clave aquí es tu cercanía, tus abrazos y que durante la noche este junto a ti; tú sabes que eso te funciona y está bien, tú y tu hija saben lo que necesitan. Se que puede sonar algo agotador Carmen pero nada mejor que mamà para calmar y ayudar al bebe a conciliar el sueño. SI tienes apoyo en casa se puede hacer un trabajo en equipo con las responsabildiades que no sean del bebe y asi tu de forma casi exclusiva atiendes a la pequeña Paula.

Importante que antes y durante de los periodos de descanso las rutinas sean visibles por el bebe y lo anime a ir a dormir, asimismo el cuarto debe estar previamente ventilado y con la iluminación adecuada (luz natural del dia, no luz blanca) que promueva el descanso. Por la noche igual. Tu presencia como mamà y tus brazos serán la mejor herramienta.
Anota en un diario del sueño, durante 15 días, como les va con estas sugerencias. De esta manera podremos ver donde hay mejorías y que situaciones aun debemos ajustar para favorecer los momentos de descanso
En la maternidad no hay reglas exactas y lo mejor que podemos hacer es confiar en nuestro olfato de mamás; si sentimos que algo no anda bien o se torna difícil, empezar a actuar. Todo lo que se haga con cariño y respeto siempre será valorado.

Como todo proceso de adaptación se irá superando, pero si podemos poner en práctica estas sugerencias que te comento, para poder cuidar la calidad de su sueño durante el día y la noche.

Espero poder ayudarte Carmen y cualquier consulta o duda aquí me tienes.
Un abrazo,
Karina

Fuentes:
Berrozpe, M., López, R. (2023) Módulo XIII: El sueño de 8 a 12 meses. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias (CESI).

Berrozpe, M., López, R. (2023) Protocolo de Intervención CESI – Dormir sin llorar- De 8 a 24 meses. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).

Jovè, M. (2006). Dormir sin lágrimas, Dejarle llorar no es la solución.
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por Karina SZ
#436592 Carmen,
Mi mensaje no salio completo, le pegar el texto falto lo siguiente:
Consultarte si Paula ya pasò consulta con el pediatra? Para poder valorar que no sea la salida de dientes u otra molestia la que también este incomodándola al momento de dormir. Te mando un abrazo y muchos ànimos! Espero poder ayudarte Carmen y cualquier consulta o duda aquí me tienes.
Un abrazo,
Karina
por Melissa Soto
#436628 Hola Carmen,

Mi nombre es Melissa Soto, alumna en práctica del Curso de Sueño Infantil de CESI, Asistente Social y madre de una niña llamada Amelia, de actuales 4 años de edad. Leí atentamente la situación que estás viviendo junto a tu bebé de 11 meses y me gustaría poder ayudarte y entregar información respecto a la etapa que están pasando.

Primero que todo, comprendo mucho tu angustia y la preocupación que sientes por tu bebé, y me siento muy identificada, ya que se parece mucho a lo que viví con mi hija hasta los 3 años. También consulté con una coach del sueño, pero realmente me di cuenta de que nadie está en tú lugar, por lo tanto, lo principal es que sepas escuchar tu instinto, qué dice tu corazón de madre cuando escuchas llorar a tu bebé por horas. Cuando la ves llorar así, te dan ganas de tomarla, abrazarla, acurrucarla, hablarle al oído, mirarla a los ojos y contener con amor esa pena que siente? Porque si es así, hazlo! No tengas miedo, ni dudas, que lo que tu bebé necesita es consuelo y sentirte cerca, ya verás como su pena irá pasando, y al mismo tiempo tu desesperación.

En segundo lugar, es importante considerar que desde los 8 meses la mayoría de los pequeños vive un hito evolutivo psicológico conocido como "Angustia por Separación" (1), lo cual hace que está sea una de las etapas más intensas a la que se enfrentas los padres. Lo anterior repercute en el sueño de los bebés, ya que si bien los bebés a esta edad ya poseen prácticamente las mismas fases del sueño que un adulto, pueden presentar muchos despertares debido a la denominada crisis del octavo mes. En este procesos los bebés se reconocen como seres independientes a sus madres, y el simple hecho de no tenerlas en su campo visual puede generar mucha angustia en ellos, lo cual se manifiesta de distintas maneras, principalmente llanto extremo debido al miedo que provoca la posibilidad de ser abandonados. En las noches, la angustia por separación puede verse como noches muy difíciles, con muchos despertares y llanto descontrolado. Para hacerle frente a este proceso se sugiere mucha paciencia por parte de los padres, mucho amor y contención, principalmente que siempre exista contacto, ya sea caricias, un abrazo, acurrucar al bebé, mecerlo, hablarle, generar contacto visual. Todo lo anterior, ayudará al bebé a calmarse, a saber que no está solo. Otro punto a considerar es que en lo posible el padre sea parte de las rutinas de dormir, ya sea de siesta o de noche, para que poco a poco el bebé también se acostumbre a dormir con el padre y que en un futuro, puedan turnarse para hacerlo dormir. Esto quitará un poco el peso que está sobre tus hombros actualmente. Lo anterior se recomienda hacerlo lentamente, de a poco, y siempre que la rutina de la familia lo permita.

Si bien, en tu relato no especificas cómo duerme tu bebé (sólo mencionas que duerme en su cuna, pero no indicas si en su propia pieza, o en la pieza de los padres), recomiendo que intentes realizar colecho (2), ya sea con su cuna al lado de la cama de los padres, o si prefieren, teniendo al bebé dormido en su propia cama. El colecho, realizado de buena forma, en condiciones segura, cuando ninguno de los padres bebe alcohol ni fuma, es una excelente forma de que el bebé y los padres puedan dormir mejor, el bebé se siente más cercano a sus figuras de apego, principalmente la madre, si aún toma leche materna facilitará este proceso y por ende, la madre también podrá descansar mejor. Adicionalmente, en esta etapa, en que está en plena angustia por separación, ayudará a que pueda sentirte cerca, olerte, tocarte, y tu también podrás hacer lo mismo de manera mas sencilla.

Otros hechos que pueden estar influyendo en el caso de tu bebé es la salida de los dientes y los nuevos hitos de aprendizaje que ocurren a esta edad (como sentarse, gatear, ponerse de pie o incluso caminar. Para el primero, se recomiendan algunas técnicas que pueden calmar sus molestias, como dar un masaje con el dedo limpio por las encías, ofrecer mordedores fríos o líquidos frescos, incluso, si aún toma leche materna podrían aumentar las tomas, ya que esto calma el dolor. Para lo segundo, se recomienda que el bebé pueda practicar sus nuevos aprendizajes durante el día, para que evite hacerlo durante la noche, y mejor aún si es al aire libre con luz de día. Nombro esto ya que también podría influir en el mal dormir a la edad que tiene tu bebé. Sin embargo, por tu relato creo firmemente que lo principal es que logres escuchar tu instinto materno, abraces y acurruques a tu bebé cuando él lo necesite.

Para finalizar, espero que la situación mejore, y si tienes consultas o comentarios, no dudes en escribirme.


Un abrazo,
Melissa Soto
:dormir_sin_llorar:


(1) Berrozpe, M. (2023) Módulo XV: El sueño de los bebés de 8 a 12 meses. En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).
(2) Berrozpe, M. (2023) Módulo VIII: El Sueño en Compañía. Video 1: ¿Qué es el colecho? . En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI).